
Nuevamente tenemos que lamentar la desaparición de alguno de los buenos. Si antes fue Cohen, hoy es Dolores O’Riordan, el alma de The Cranberries.
Esta irlandesa de Limerick creó un primer disco enorme, con unas canciones que una a una y en conjunto, configuraron el arranque fulgurante del grupo. Las letras de Dolores encontraron su complemento idóneo en las músicas con las que las envolvieron. Y el directo de Cranberries mostró un grupo poderoso, emotivo, que no permitía la indiferencia, que sonaba sincero en un mundo tan lleno de montajes y de sonidos impostados y artificiales.
Un debut tan impactante tuvo continuación con discos que no pudieron alcanzar ese mismo nivel, pero que venían trufados con grandes canciones, siempre con aroma de las músicas irlandesas, tanto en baladas como en composiciones más potentes y tanto en canciones propias como en alguna adaptación de melodías tradicionales.
Curiosamente, su último disco es de esos que también poseen algo especial. La grabación en acústico de varias de sus canciones añade dimensiones adicionales y potencia su apreciación.
En una película bastante prescindible, resulta inolvidable su última escena gracias a la música de O’Riordan y sus compañeros. De Pret-a-porter, infumable obra del en general muy buen director, Robert Altman, con un reparto de los supuestamente estelares, solo es destacable el desfile de moda final, con las modelos desnudas, mientras se escucha una de las grandes canciones del primer disco de Cranberries, Pretty.
Esta sería mi lista de canciones favoritas, incluyendo Will you remember, que figura entre las 200+ de la web.
(Publicada inicialmente el 16/1/2018 con motivo del fallecimiento de O’Riordan)