Diana puede ser considerada como otro hito, menor eso si, en la cronología de la música pop. En efecto, esta canción, compuesta por un muy joven Paul Anka, puede representar la primera realmente pop que consigue adueñarse de las listas de éxitos. Vista desde nuestros días, la canción puede quedar muy melosa pero si la ubicamos en su contexto,en el preludio de la eclosión de los 60, representa la decidida incorporación de la música popular joven a la vida cotidiana y rubrica el punto de inflexión de una música que establece sus propias reglas y que discurrirá por caminos propios aunque con encuentros constantes y fructíferos con otros géneros. Como no queremos poner etiquetas innecesarias, digamos que entre el pop y el rock se ubica, el pop-rock, sin fronteras definidas, además de innecesarias.
Paul Anka, canadiense, tuvo numerosos éxitos posteriormente, con una carrera muy dilatada, pero lo que le dió la fama definitiva fue una canción cuya autoría casi se adjudicó y que no es otra que la hiperversionada My way. Esta canción fue popularizada por Frank Sinatra en 1968 e inmediatamente se convirtió en un standard.Sin embargo, la versión original de la canción es del francés Claude François y llevaba el título Comme d’habitude.
Paul Anka cambió la letra de la canción de Claude y mantuvo la música.
Este cantante fue muy popular en Francia y tuvo poca repercusión fuera de su país, aunque en España alcanzó cierta notoriedad porque sirvió como introductor, a través de versiones muy suyas, de hits estadounidenses. A guisa de ejemplo, mencionemos Si j’avais un marteau, la combativa If I had a hammer, original de Pete Seeger.
Por cierto que el famoso martillo volvió a golpear fuerte cuando el latino Trini López hizo la versión más popular.
La canción de la que proviene My Way fue compuesta en 1967 por François, bajo el impacto de su separación de France Gall que, como se recordará, también aportó su granito de arena musical cuando ganó Eurorrisión con la tremenda Poupée de cire, poupee de son.
Claude François murió joven, a los 39 años, lo que contribuyó a cimentar su relativa condición de ídolo local, más bien pasajero, en Francia.
Si bien My way es una canción indudablemente popular, el que suscribe la considera la más empalagosa de la historia de la música pop, quizás por la enorme cantidad de versiones que ha generado y lo mucho que ha sido emitida por las ondas.
Para no ser menos, José Guardiola, el rey de las versiones en España, grabó su personal adaptación en catalán.